Entre la Utopía

Abstract

¿Cómo somos los colombianos? ¿Que nos distingue como país?, son preguntas que apuntan a resolver el muy discutido tema de la identidad cultural, y que se identifica con el interrogante sobre el “alma” de los colombianos. Hay una pieza celebre de Gabriel García Márquez, en la introducción del primer documento sobre la misión de la ciencia, la educación y desarrollo, más conocida como “El informe de los sabios”, de mediados de 1994 en la que el Nobel dibuja esta manera de ser de los colombianos. Hala de nuestros dos dones naturales propios que son “la creatividad, expresión superior de la inteligencia humana” y “una arrasadora determinación de ascenso personal”. Los dos ayudados por “una astucia casi sobrenatural y tan útil para el bien como para el alma”, a las cualidades anteriores se unen una “plasticidad extraordinaria para asimilarnos con rapidez a cualquier medio y aprender sin dolor los oficios mas diferentes”. De esa mezcla, resulta características paradójicas y complejas como la der emigrantes, aventureros, buscadores de riesgos, buscadores temario de la fortuna; aquellos que nunca pasar por inadvertidos en ninguna parte, nunca resignados a morirse de hambre, siempre nostálgicos de su patria, desmesurados en el amor y el odio, intuitivos, autodidactitas, espontáneos, trabajadores encarnizados, llenos de rencores políticos, olvidadizos de la historia, capaces de los actos nobles y de los abyectos. Somos un país de fiesta de alegría, pasiones y el país del divino niño, devoto a la cultura de sus ancestros.